lunes, junio 18, 2012

Testimonio por Aníbal Lopez, Documenta 13

Apreciaciones personales sobre algunas obras de Documenta 13

Cuarta Parte


En la guía de Documenta:
On June 8, Guatemalan artist Aníbal López interviews a contract killer from his home country in front of an audience. The artist talks with the killer (unidentifiable to visitors) about his work and profession. The performance is photographed and recorded on video and, together with a series of drawings, displayed in the Neue Galerie as part of the exhibition.

La obra aparece bajo la categoría de performance y se presentó 2 días antes de la apertura al público en lo que se llama Professional Preview, que es una suerte de VIP. 

Lastimosamente entre tarde, así que esta es una descripción parcial del performance:
En la sala están dispuestas las sillas frente a un escenario. En el escenario hay una pantalla blanca e iluminada que permite ver la silueta del sicario. Opuesto al escenario hay dos cabinas de madera cerradas donde dos mujeres traducen simultáneamente entre inglés,español y alemán.
El público hace las preguntas. 


Esta es una obra difícil porque depende de las preguntas del público. La audiencia es internacional y muchos de ellos no han tenido ninguna relación con Guatemala en su vida, desconocen el contexto histórico social del asesino y (presiento que) su relación con la criminalidad y la pobreza ha sido talvez solamente mediática. 
Uno de los problemas que percibo es que " contract killer" y sicario no son sinónimos. "Contract killer" nos suena mas a Hollywood, como uno de estos tipos que va vestido de negro, viajando en avión de aqui para allá, haciendo trabajos muy bien pagados...

Las preguntas tenian un tono moralista sobre este hombre malo que por "libre albedrío" decide matar. Ya el juicio estaba dado: 
 ¿Puedes dormir en la noche?
¿Crees en Dios?
¿Hay algún trabajo que te niegues a hacer?
¿Tienes pesadillas con la gente que matas?

Las preguntas un tanto morbosas recibieron respuestas brutales, con detalles de sangre y violencia. Tambien se preguntó sobre el modus operandi:
-Trabajamos en grupo... necesito a alguien que despeje la calle... alguien que me cuide la espalda...ganamos hasta 15.000 quetzales* pero hay que pagarle a los que me ayudaron, trabajamos en grupo, somos un grupo.

 Otras preguntas y respuestas dan luz sobre su mundo:
 ¿Qué pasa si no haces tu trabajo? Me matan
¿Te han matado familiares, cómo? Si claro, a un primo y a mi prima de 15 años
¿Y que hace la policía? La policía es de lo más corrupto que hay en Guatemala
¿Disfrutas tu trabajo? Trabajo es trabajo, yo no le pongo corazón.

El muestra conciencia de lo que hace y claridad:
 ¿Crees que es diferente matar en el ejercito que hacer tu trabajo? No, matar es matar, muerte es muerte
-Yo me quiero superar por eso estudio derecho en la Universidad de San Carlos y quiero salir adelante
-No quiero que mi hijo haga esto
-Voy a dar charlas a jóvenes para que no se metan en esto

Y sin embargo entre el morbo y el sensacionalismo se perdió el ser humano: no hubo una segunda oportunidad por parte del público, él era malo antes, durante y después de la obra. Extirpado de su contexto, de su clase social y separado de la historia de violencia de Guatemala, él es el malo aunque sus jefes tengan su vida en sus manos y sean los que deciden a quién se debe matar y cómo.


*15.000 quetzales aproximadamente $2000

No hay comentarios.: